La hipnoterapia está respaldada por investigaciones científicas y ha demostrado ser efectiva para varias condiciones y propósitos. Se considera segura y no invasiva; sin embargo, hay algunos riesgos y contradicciones de los que ser consciente.

Las personas con ciertas condiciones psicológicas, como la esquizofrenia u otros trastornos psicóticos, pueden no ser candidatos adecuados para la hipnoterapia. Además, aunque raro, algunas personas pueden experimentar efectos secundarios físicos leves y temporales durante la hipnosis, como mareos, náuseas o dolores de cabeza.

Es importante destacar que, aunque la hipnosis puede ser altamente efectiva para muchos individuos, puede no producir los resultados deseados para todos. La susceptibilidad individual y la motivación son factores significativos que pueden influir en la efectividad de la hipnoterapia.